Friday 12 February 2021

Siempre

 Hoy un día más y, sin embargo...

Porque parece un día más no debería serlo.

Leemos, escuchamos que debemos estar agradecidos por habernos despertado hoy... como ayer... como la semana pasada.

Pese a que todos sabemos que la vida es un milagro, seguimos como si nada casi automáticamente con nuestros quehaceres, rutinas, movimientos casi involuntarios.

Y es que movimiento no implica acción. Hasta algo inerte puede llegar a moverse por alguna fuerza exterior.

El día de hoy es un milagro... debemos abrazarlo y agradecerlo como tal. Pero, también es cierto, que suena a una responsabilidad pesada sentirlo, entenderlo así. Como si tuviéramos la responsabilidad de hacer algo extraordinario a cada momento.

Quizá sea más sencillo... como los animales, las plantas, el medio ambiente, despertarnos cada día significa tener la posibilidad de experimentar una vez más sensaciones de gozo, tristeza y de nada. Simplemente fluir. Si en ese fluir queremos experimentar algo más, abrir el juego.

El único límite es recordar que otros están viviendo sus propias experiencias. Entonces, agradecido de poder estar escribiendo estas palabras, casi que solas, sin la obligación de hacer más o hacerlo bien, de una forma u otra. Simplemente, sencillamente hacerlo.

No necesito preocuparme por nada más que ser yo mismo... por ser feliz para mi mismo y por mi mismo. De la luz que irradio otros se llenan... y yo me lleno de su luz. El ser sencillamente siendo implica comunión con los demás sin siquiera pensarlo. Es una cadena... de eslabones unidos sin pensarlo. Yo estoy feliz y les transmito felicidad... ellos son felices y me inundan de felicidad.

Estoy creando... estamos creando... sin siquiera pensarlo, sin siquiera quererlo, sin siquiera intentarlo... solamente siendo pues el hacer se encarga por si solo de aparecer.

Aquello que ya no sirve queda atrás. Agradezco haberlo vivido y lo dejo ir. Todo lo que tengo, todo lo que soy es aquí y ahora. Ayer ya no es... mañana, Dios dirá. Es ahora, en este momento en que soy, simplemente soy.


Porque hoy soy quien fui ayer y quien seré mañana

siempre fui el mismo y, sin embargo, continuo evolucionando.

El experimento es cada día, ayer, hoy y siempre...

aquí, allá y más allá en lo profundo, en lo superficial.

Dios me ha dado la posibilidad de hacer una experiencia personal,

desde mi sitio, desde este tiempo, en la corriente

que es la vida desenvolviéndose, quietamente o caminando.

Pues el de ayer, el de hoy escriben juntos, nuestra historia, mi historia, tan gitana.

Dios es más grande que aquel nirvana,

En sus manos está mi cada paso, andando.

Él es quien pinta el camino y alrededores, total o parcial

pues me permite ser quien quiero, a veces tan trivial

otras tantas, tan importante en una mentira constante, creciente.

No me digas quien soy, no te diré quien eres

pues ni a ti te corresponde ni a mi me compete.

Sencillamente sé quien eres que con eso es suficiente,

y lo mismo para mi, a ser quien soy que de eso de trata este juego.

Pues ni tú ni yo saldremos vivos, así que a seguir jugando, acertando, equivocándonos, aprendiendo o solamente siendo.

Ayer ya fue, mañana quien sabe... solamente tengo el hoy, y de ese hoy, este instante, tan aquí, tan ahora.


Viernes 12 de febrero de 2021.

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